La reacción de Quinn en la afterparty de The International 2025 rápidamente se convirtió en uno de los momentos más comentados en la escena de Dota 2, mostrando el impacto personal que dejó la polémica retirada de Gaimin Gladiators.
En videos compartidos de la celebración, Quinn, conocido por su consistencia y calma como el mid-laner estrella de GG, aparece felicitando a Team Falcons por su victoria en el campeonato. Cuando Ammar “ATF” Al-Assaf, recién coronado con el Aegis of Champions en sus manos, le ofreció a Quinn la oportunidad de sostener el trofeo icónico, su respuesta fue tan emotiva como reveladora.
Quinn levantó las manos y rechazó en silencio, diciendo: “No quiero… [el resto fue inaudible por la entrevista]”, antes de agregar con sinceridad: “Pero estoy muy feliz por ustedes”.
Sus palabras reflejaron gracia y deportividad incluso en medio del dolor personal, y ese breve intercambio cargó con un simbolismo enorme tanto para Quinn como para toda la comunidad. Para un jugador que ya había perdido en las finales de TI 2023 y 2024, negarse a sostener el Aegis fue más que un gesto: fue un recordatorio crudo de lo que aún le falta por lograr.
La decisión de Gaimin Gladiators de retirarse semanas antes del evento dejó a los fans impactados y al roster fuera de competencia, con Valve confirmando en ese momento que no se había podido llegar a un acuerdo entre jugadores y organización. Para muchos hinchas, esta escena se transformó en símbolo de los desafíos que enfrentan los jugadores más allá de los reflectores. Los seguidores inundaron las redes sociales destacando la fortaleza de carácter de Quinn, pero también criticando los problemas estructurales en los esports que pueden frenar a competidores de talla mundial de cumplir su máximo potencial.
A pesar de no tener un rol directo en el torneo, la presencia de Quinn en la afterparty reflejó tanto su amor por la comunidad como las complejidades emocionales del juego profesional. Mientras la escena avanza y la atención se centra en las próximas competencias, la historia de Quinn queda como recordatorio de lo mucho que está en juego para quienes dedican su vida al juego.
Su negativa a sostener el Aegis puede quedar marcada como uno de los momentos más emotivos de TI 2025, porque mostró el lado más humano de los esports: los triunfos, sacrificios y dolores que existen más allá de los titulares. En muchos sentidos, fue un momento que encapsuló el espíritu de The International tanto como cualquier jugada dentro de la arena.
